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Habrás notado que, últimamente, el verano es más caluroso que nunca. Todos sufrimos este calor, pero especialmente lo sufren los trabajadores de la construcción. Estos son los que directamente están expuestos a los riesgos del verano para el trabajo en la construcción. En zonas en las que los niveles de humedad son muy elevados, se puede llegar a crear un ambiente de trabajo muy peligroso.

Además, la época estival es la temporada álgida en la construcción. Así que no nos queda más remedio que seguir trabajando como si Lorenzo no nos deleitara con una temperatura de 35ºC a la sombra.

Para evitar situaciones de riesgo, lo que debemos hacer es asegurar un ambiente de trabajo que mantenga a nuestro equipo seguro del calor.

¿CUÁLES SON LOS RIESGOS DEL VERANO PARA EL TRABAJO EN LA CONSTRUCCIÓN?

• Agotamiento por calor: Es la antesala del golpe de calor. Los mecanismos reguladores del calor del cuerpo pueden fallar, de forma que el cuerpo no puede encontrar la forma de enfriarse a sí mismo de manera natural.
• Golpe de calor: Cuando el cuerpo se expone a temperaturas excesivamente altas, los mecanismos reguladores del calor pueden fallar, causando fiebre e incluso la pérdida de conciencia.

¿CÓMO CREAR UN AMBIENTE DE TRABAJO SEGURO ANTE TEMPERATURAS EXTREMADAMENTE ALTAS?

• Informar a los trabajadores: informar a los trabajadores de los riesgos del trabajo en temperaturas extremas es clave para prevenir situaciones de riesgo.
• Planificación: Lo óptimo para trabajar en las temporadas de altas temperaturas, es establecer horarios de trabajo en los cuales se trabaje en las horas más frescas del día.
• Agua: es indispensable disponer de agua fresca de fácil acceso para todos los trabajadores de la obra. Bebe agua aunque no tengas sed cada 15 o 20 minutos.
• Áreas de sombra: siempre que sea posible, crea áreas de sombra en las zonas de trabajo.
• Descansos: realiza descansos, a la sombra, para beber agua y mantenerte hidratado.
• Vestimenta: viste prendas de seguridad livianas, que transpiren y eviten que el calor quede retenido. La cabeza y el cuello son las zonas más importantes a proteger del Sol. Utiliza siempre casco y pañuelo de enfriamiento en cabeza y cuello.
• Protector solar: tanto en la obra como fuera, es importante aplicar loción de protección solar en el cuerpo para evitar quemaduras. Recuerda aplicarla regularmente durante el día.
• Estar alerta: estar atento a los síntomas del agotamiento o golpe de calor puede prevenir sufrirlos. Al primer síntoma, avisa, toma un descanso e hidrátate.